lunes, 15 de enero de 2018

Nación Z pero en la póbla…


Desde la ventana de su sala en el piso 13, en el departamento de mi amigo JP. A lo lejos, en dirección Noroeste, mas menos a diez cuadras de la grande, se pueden ver los fuegos artificiales que son lanzados casi a diario, son hermosos, es como vivir todos los días año nuevo, siempre los lanzan de noche, así se aprecian de todos los puntos cardinales, parece felicidad, fiesta, jolgorio, pero no es así. Si puedes achicar los ojos, afinar la vista o simplemente usar unos prismáticos, veras como una horda de Zombis, se acercan rápidamente desde todos los puntos, son como un aro humano o un hongo que rodea los fuegos, llegan rápidamente como atraídos por el olor a carne, por mucho rato se ve como llegan, después los puedes ver alejarse, pero muy lentamente, algunos caen a mitad de camino, algunos ni siquiera logran salir de de la zona iluminada, ahí se quedan con la mirada perdida en el firmamento y así, todos los días, sin variación alguna, a veces a los que lanzan los fuegos se les termina la pólvora, y se puede ver a los Zombis mirando al cielo, desesperados por la luz, la única luz que ilumina sus vidas…