jueves, 16 de octubre de 2014

Café Tortoni

Cada tarde derrama una lagrima en su  expreso con coñac, cada tarde escucha los compases al ritmo de un bandoneón,  cada tarde recuerda esas  piernas con encaje,  cada tarde sueña con sus labios rojos, cada tarde se imagina atado a su cintura,  por más de cinco años ya…  ahí,  en el Café Tortoni,  en Avenida de Mayo,   en el gran Buenos Aires…


Rey Neira Bustamante



miércoles, 15 de octubre de 2014

Rescate...

Eran siete amigas, todas del  7ª,  querían rescatar a los perros de la calle, un día  quedaron de juntarse  en el 22  de Gran Avenida para rescatar al  Pitilla,   un galgo abandonado.  Por un mensaje de texto la Grace avisó que no le dieron permiso, se fueron todas llorando, si no podían rescatar a la Grace, menos rescatarían al Pitilla…


Rey Neira Bustamante



miércoles, 8 de octubre de 2014

Voyerismo infantil

Creo que tenía seis o siete años más menos, a media cuadra de mi casa vivía la Mari L. no pondré el apellido para mantener el anonimato... casada con dos hijos.. vos ronca por el tabaco, muy interesante, madre de mi vecino y amigo Pablo... por alguna razón me atraía, siempre me gusto, cuando visitaba a mi madre me quedaba siempre cerca solo para escucharla, tenía una forma muy seductora de hablar, me pase hartos royos con la señora, recuerdo que en una de sus visitas  hablaban con mi madre de un rumor que circulaba en el barrio sobre un romance que tendría ella con un vecino más joven, no recuerdo su nombre, Mari se defendía de los vecinos chismosos,  me llamo la atención que ella sonriera al hablar de aquello, ese mismo fin de semana mi madre organizo una reunión de amigos para charlar beber un trago y picoteo... en ese tiempo se le llamaba malón,  por supuesto que asistió mi vecina Mari, por más que trate de acercarme a ella mi madre me mantuvo lejos del centro de la reunión, me senté en la silla más lejana y desde ahí observaba a mi Mari... grande fue mi sorpresa cuando vi entrar al vecinito involucrado en la historia... saludo a todos y se sentó en frente de ella, desde mi posición podía verlos a los dos, me dedique a vigilarlos, quería sorprenderlos infraganti en una mirada cómplice o que se yo, creo que fueron celos... estaba tramando mi más  siniestra forma de eliminarlo cuando claramente ella le hizo una seña con la mirada invitándolo a salir al antejardín, primero fue ella la que se dirigió a la puerta de salida, treinta segundos después salió el,  parecía que solo yo me percate de las malas intenciones pues el resto ni se inmutaron por dicha acción,  de un salto me baje de mi punto de observación y sigilosamente me escurrí a la ventana que daba al jardín,
deslice con mucha cautela la cortina para poder ver hacia afuera, el corazón se me subió de golpe a la boca al mirar  la escena, estaban los dos  muy abrazados besándose,  desde mi posición pude ver como se devoraban la boca uno del otro, era tanta la pasión que pusieron en ese beso prohibido que nunca lo pude olvidar, se regalaban la lengua, mordían los labios con desesperación, se recorrían el cuerpo entero con sus caricias, el dolor de sentirme engañado paso a un calor que recorrió todo mi cuerpo, no podía despegar la mirada, era como si fuera yo el que estaba con ella, sentía las mejillas hirviendo... sentí cosas que jamás sentí antes, creo que me hice un hombre aquel día, nunca mas  volvería a ser el mismo...

lo que viví esa noche fue un reflejo de como viviría el resto de mi vida, después de aquello la evitaba, pero perdone su infidelidad por darme los mejores diez minutos de mi despertar erótico en mi niñez...


Rey Neira Bustamante